jueves, 1 de octubre de 2009

Nueve millones de niños menores de 5 años mueren cada año en todo el mundo



Cerca de nueve millones de niños menores de 5 años mueren cada año, la mayoría por causas y enfermedades que podrían evitarse, como la neumonía, la diarrea, el sarampión, la malaria o el VIH/SIDA. Lo dice un demoledor informe presentado este miércoles por la organización Save the Children que ha añadido, además, que por culpa de la crisis económica mundial entre 200.000 y 400.000 niños adicionales perderán la vida cada año hasta 2015.

Esa cifra de nueve millones de muertes al año desvela, simplificando el número, que 24.657 niños fallecen cada día o, lo que es lo mismo, 17 menores de cinco años mueren cada minuto. De hecho, en el tiempo en el que se tarda en leer esta línea de texto ha fallecido un niño en algún lugar del mundo.

El informe (La siguiente revolución: démosle a cada niño la oportunidad de sobrevivir) especifica que en países como Afganistán uno de cada cinco niños morirá antes de tener cinco años y que en toda la región de África subsahariana esta cifra ascenderá a uno de cada siete.

Y "mientras que en países occidentales se han encendido todas las alarmas por la gripe A, países como Sierra Leona se enfrentan continuamente al impacto de lo que sería el equivalente a 2.200 epidemias de gripe A al mismo tiempo, en cuanto a la mortalidad infantil de menores de 5 años", ha detallado el director de Save the Children en España, Alberto Soteres.

Junto al informe se ha presentado la campaña 'Todos contamos para salvar vidas', cuyo lanzamiento oficial será el próximo 5 de octubre. Con ella se pretende alcanzar el cuarto Objetivo de Desarrollo del Milenio: reducir en dos tercios la mortalidad infantil de menores de cinco años hasta el 2015. Se trata de la mayor campaña emprendida en la historia de esta organización y supondrá una inversión de más de 1.000 millones de euros.

Annie Lennox y Julia Ormond

La presentación de esta iniciativa ha contado con la presencia de la cantante Annie Lennox y la actriz Julia Ormond, quienes han pedido el boicot a las empresas que usan mano de obra esclava, una realidad que sucede "delante de nuestras narices, pero son invisibles".